Respuesta A Una Extraña

“Ama para que la vida no se consuma en palabras”, Querida extraña te escribo porque he recibido tu mensaje, deseo responderte aunque déjame aclararte que no todo tiene respuesta....

Eres una mujer espectacular, cada momento a tu lado fue tan mágico y especial que no los podré olvidar, es increíble hablar contigo mientras reposo mi cabeza en tus piernas y acaricias mi cabello con tus delicadas manos, constantemente te recuerdo pues al tomar café vuelven a mi esos momentos donde hablábamos ya sea por llamada o whatsapp donde esperar a que respondieras mis mensajes se volvían los minutos más eternos de mi vida.

Aunque sientas que soy para ti aquella estrella la cual no puedes alcanzar, te confieso que para mi valió la pena todo, nunca imaginé que una mujer mayor que yo me generaría tantas sensaciones, me permitiste en cada conversación introducirme a un mundo lleno de regocijo y alegría esto sin contar nuestras conversaciones candentes “Ufff” era como sentir que estabas a mi lado y que nuestra imaginación fluía de una forma libremente.

Aquel encuentro fue tan especial que jamas lo olvidare, me encantan tus besos y tus caricias me excitaron tanto que se me hizo difícil controlarme, nuestra historia estuvo llena de momentos lúcidos como aquella cita donde a pesar de lo que sentía por ti no di el primer paso por temor a no ser correspondido o a ser rechazado de una forma brutal porque aunque no lo parezco suelo ser muy frágil, me hubiera encantado que lo nuestro hubiera durado un poco más pero comencé a dudar de mi mismo, comencé a dudar de a quien amaba realmente, para colmo me tropeze con la balanza del amor y el deseo fue allí estabas tú mi querida extraña y del otro lado estaba la mujer que amo, no podía tomar una postura neutral era el amor o el deseo, creo que ya sabrás cual fue mi decisión.

Sin embargo déjame decirte que has dejado una huella en mi ser difícil de borrar, si deseas podrás ser mi amiga, mi confidente y quien sabe que de pronto algún día desee abrir aquella puerta la cual no cerraste para siempre.